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miércoles, 16 de enero de 2013

BREVE RESEÑA HISTÓRICA DEL MUNICIPIO DE MAO


Mao, puerta de entrada del histórico Noroeste, tiene su origen en aquellos años después del 1606 cuando numerosas familias huían con las pertenencias que podían de los incendios generalizados a bohíos, haciendas, cultivos y bosques ejecutados por el entonces Gobernador de la Isla Antonio de Osorio, previo mandato del rey de España Felipe III, para contrarrestar el intercambio que los pueblos del nor-occidente de La Española (como Montecristi y Puerto Plata) mantenían con aventureros de naciones consideradas enemigas para la época del reino español (holandeses, ingleses y franceses).

Reyes, Rodríguez, Disla, Bonilla, Peña, Cabral, Aracena, entre otros, son núcleos familiares que se fueron estableciendo en la Mesopotamia que conforman los ríos de Mao, Gurabo y Yaque del Norte (jurisdicción denominada posteriormente con el nombre de “Tierra entre Ríos), mediante hatos y haciendas, los que por su crecimiento originaron un caserío que luego habría de llamarse Santa Cruz de Mao.

Francisco Reyes, Mejor conocido como Tito, oriundo de Moca, y llegado al poblado de Mao a mediados del siglo XIX, se estableció en lo que hoy es la entrada de la ciudad (desde Santiago y Esperanza) y que los moradores hoy día llaman “Hatico”, palabra que viene al señalarse en los años del 1800 “El Hato de Tito” o “El Hatico de Francisco Reyes”. Más Tarde, en el año 1882, ya anciano, correspondió a este honorable munícipe ejercer la Vicepresidencia del primer Ayuntamiento que se estableció en la Villa de San Cruz de Mao.

Debe recordarse que un señor llamado Juan Sibila se estableció en los primeros años del pasado siglo con su familia en el lugar que hoy se denomina (dentro de la ciudad de Mao) barrio o sector de “Sibila”, exactamente por donde queda el play de béisbol o estadio “Pucho Marrero”. Otros Puntos de la hoy ciudad de Mao donde se establecieron familias que con el pasar del tiempo originaron varias de las que hoy conocemos, son los siguientes: por donde actualmente está el Liceo Secundario Juan de Jesús Reyes”, estaba lo que se llamaba la “Sabana de los Cabral”; la casa del señor Fructuoso Rodríguez estaba por donde hoy se encuentra la clínica de su descendiente “Dr. Rafael Rodríguez Colón” (descendiente del señor Fructuoso), la de Andrés Bonilla (oriundo de El Puñal, Santiago) y Altagracia Méndez (mejor conocida en su época como “Mama Calasa”) se encontraba por el área donde finaliza la hoy calle Sánchez, en dirección al río Mao.

Precisamente, por el poblado establecerse muy cerca de las riveras del río Mao se le dio el nombre con el cual se conoce por todo el país y que hoy lleva con significativo orgullo. Investigadores señalan que “Mao” o “Maho” es una voz indígena de origen taíno que traducida al español los aborígenes querían decir “Milagros”, con la cual bautizaron el río, caracterizado por la abundancia y frescura siempre de sus aguas, y por la cantidad de oro que disponía en todo su cauce.

En el año 1869, se dio la categoría de Sección al entonces poblado de Santa Cruz de Mao (el nombre de Santa Cruz es derivado de su primera Parroquia y de su patrona establecida por la Iglesia: “La Santa Cruz”). El 5 de agosto de 1875, durante el gobierno del General Ignacio María González, el poblado fue elevado a Puesto Cantonal, formando parte de la provincia de Santiago. El 25 de noviembre del 1882 logró la categoría de Común o Municipio. En el año 1959, es creada la provincia de Valverde, siendo el educador Manuel Francisco Evertz su primer Gobernador. La provincia quedó constituida por los municipios de Mao (como poblado cabecera) y Esperanza, con el Distrito Municipal de Laguna Salada. Esta última fue elevada posteriormente a Municipio.

Mao, es tierra de héroes y mártires. En la Barranquita, resistiendo la ocupación norteamericana de 1916 logró su máxima expresión de heroísmo y patriotismo. Manuel Jiménez, de Gurabo, Jaibón (sección próxima del poblado) es uno de los principales oficiales del batallón “Entre Ríos”, integrado por hombres de la jurisdicción y que proporcionó valiosos aportes en las luchas independentistas y restauradoras.
Iniciando la tiranía de Trujillo, el legendario caudillo Desiderio Arias, que ya había establecido en Mao su base operacional, cayó asesinado en 1931 bajo el disparo traidor de unos de sus propios hombres en las cercanías del poblado (en las lomas de Gurabo).

En el 1869, Mao Construyó su primera edificación en madera para la iglesia, la que fue bendecida por el Presbítero Carlos María Piñeyro el 8 de marzo del 1870; posteriormente destruida por un incendio ocurrido en la noche del 18 de diciembre del 1896. La primera escuela se instaló en el 1883 en el denominado Colegio para Varones “San Gregorio”, el cual operó en la misma casa del Ayuntamiento Municipal que había sido establecido el año anterior. En el 1908 se construyó el Parque de Recreo “Dolores”, luego bautizado con el nombre de “Amado Franco Bidó” en honor a la memoria de quien lo construyera y quien sirviera a Mao con numerosas diligencias que organizaron la base del desarrollo de la comunidad; finalizando la década de los 90 la Sala Capitular le puso el nombre de “Dr. José Francisco Peña Gómez”, restituyéndole en el 2008 el de “Amado Franco Bidó”, nombre que nunca debió serle quitado.

Mao tiene el mérito de haber sido el primer lugar del país donde se utilizó el riego organizado para el fomento de la agricultura y donde por primera vez se cultivara el arroz mediante reguío. En 1919 se inauguró el Canal que construyera el oriundo de Bélgica Luís Liberto Bogaert. Tres años después, productores maeños aglutinados en la sociedad “Regantes de Mao” construyó un segundo canal que inauguraron en el 1923, aprovechando ambos las aguas del pródigo río Mao contribuyendo esto en la transformación económica y social de todo el municipio.

El municipio de Mao celebró su Primer Centenario de Vida Municipal en el 1982, siendo este el mayor evento artístico-cultural celebrado hasta ahora en la ciudad. En 1997 sirvió de sede de los Juegos Deportivos Nacionales, y hoy día es asiento de importantes instituciones públicas y privadas con gran incidencia en el desarrollo de toda la región noroeste, como son las oficinas regionales de Salud, Educación, Agricultura, Instituto Agrario Dominicano, Obras Públicas, Cuarta Brigada del Ejército Nacional, etc.; así mismo, del Instituto para el Desarrollo del Noroeste, el Obispado de la región, el Centro Universitario Regional del Noroeste de la UASD, la Extensión de la Universidad Tecnológica de Santiago y el Instituto Politécnico del Noroeste, entre otras.

Numerosos bancos como el Reservas, Banco Agrícola, Popular, Progreso, Nueva Scotia, BHD y la Nacional de Ahorros y Préstamos han establecido sucursales en Mao como consecuencia de su gran dinamismo económico y progreso en sentido general. También, dispone de oficinas de reconocidas cooperativas y asociaciones de productores para la exportación que han generado cientos de empleos. Mao, con los demás municipios que componen la provincia de Valverde, constituye el centro de mayor producción de banano orgánico, convirtiendo a nuestro país como el mayor exportador de este rublo en todo el continente. Dispone hoy día de una media docena de emisoras radiales, tres compañías de canales de televisión por cable y de numerosas oficinas que ofrecen el servicio de comunicación mediante el sistema de celulares, convirtiendo a Mao en una de las ciudades con mejores y más efectivos sistemas de comunicación.

Nuestro municipio se ha internacionalizado al pasar a formar parte del Programa Internacional de Ciudades Hermanas (Sister Cities International), pues ha establecido protocolos de hermandad con las ciudades de Mayagüez de Puerto Rico y Harford (Connecticut) de los Estados Unidos de América. Con esta última ha alcanzado importantes logros que han mejorado de manera sustancial a nuestro Cuerpo Municipal de Bomberos.

Mao es una ciudad caracterizada por sus canales, los arrozales que le rodean, la hermosura de sus mujeres, la laboriosidad y heroísmo de sus hombres y unos bellos atardeceres que por mandato divino sólo desde su ubicación geográfica pueden alcanzarse a ver al finalizar cada tarde de verano en las llanuras del noroeste que es cubierta de un rojizo encendido entremezclado con el azul de nuestro cielo, por lo que fuera bautizada con el nombre de La “Ciudad de los Bellos Atardeceres”, por el educador y poeta Ramón Emilio Jiménez al desarrollar su labor de Inspector o Encargado de Educación en este poblado en la década del 20 del pasado siglo.

Escrito por Manuel Rodríguez Bonilla y Francisco Antonio Bonilla (Quiquito)

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