SEMBLANZA DE DOÑA TEÓFILA MARÍA GÓMEZ BREA DE REYES
Nuestra distinguida dama Doña Teófila María Gómez Brea nació en Jaibón, Mao, el 3 de Noviembre del año 1905, siendo la penúltima de los 13 hermanos que procrearon los esposos Ramón Gómez y Ana Dolores Brea. Luego vivió en Santiago, donde cursó sus estudios primarios. Casó en esta ciudad de Mao con Rafael Reyes (Fello), productor agrícola ligado políticamente al caudillo Desiderio Arias. Estuvieron casados hasta el fallecimiento de su esposo, el 15 de junio de 1959. Quedando viuda a los 54 años de edad, supo mantener con estoicismo y sacrificio sus ocho hijos logrando hacer una familia ejemplar.
Sus hijos: Casilda, Antonia, Félix, Frank, Dalba, Rafael, Anulfo y Jochy. Su generosidad y amor eran tan inmensos que además crió varios hijos de don Fello a quienes trató sin distinción de los que ella había procreado, brindándole amor y educación guiándolos por el camino de la honradez, decencia y el compromiso social. Al igual que "La Madre", título y personaje central de la novela revolucionaria del escritor ruso Máximo Gorki, la nuestra, doña Teófila Gómez Brea, tuvo el carácter y la templanza de apoyar a sus hijos en sus ideas políticas y revolucionarias, sobre todo a Rafael y Anulfo quienes participaron luego del golpe de estado al Profesor Juan Bosch en el 1963 en el alzamiento guerrillero encabezado por el gran líder y héroe nacional Manolo Tavárez Justo, cobardemente asesinado en Las Manaclas.
En su hogar recibió muchos jóvenes catorcistas que fueron a Mao en misiones políticas y eran protegidos como sus hijos a sabiendas del peligro que esto implicaba guardando además documentos y papeles comprometedores que le confiaron jóvenes rebeldes. Entre ellos Sagrada Bujosa, Sóstenes Peña Jáquez, Muni Díaz y Rodrigo Lozada. Estos tres últimos fueron luego asesinados en el alzamiento en San Francisco de Macorís durante la guerra de abril del 1965.
Fue una persona sumamente religiosa, rezaba frecuentemente al punto de llamar la atención de Anulfo quien un día le dijo: "Mamá, pero tú si rezas", a lo que ella rápidamente le contestó: "Por eso estás tú vivo", en obvia referencia a las situaciones de alto riesgo por la que atravesó el joven catorcista guerrillero.
En otra ocasión, el benjamín de la familia estaba muy cambiadito de ropa porque iba a conocer la capital en un camión propiedad de su hermano Félix. Al momento de salir, como era su costumbre los bendijo y concluyó diciendo: "Que Dios los acompañe mis hijos", a lo que Jochy, sin pensarlo le dijo: "Bueno, Dios irá atrás, porque aquí alante no cabe". Su reacción no se hizo esperar, lo tomó del brazo, lo apeó del vehículo diciéndole: "Dios sí va a caber, porque tú te quedas". No hubo pataleo ni llanto que valiera, sencillamente se quedó. Porque aunque fue una madre dulce, abnegada y amorosa, tenía un fuerte carácter y una personalidad que hasta don Fello respetaba. Vivió para servir y su hogar era un punto de encuentro de todos quienes necesitaran un aliento o una mano amiga.
Doña Teófila, nosotros que fuimos testigos de sus desvelos, que vivimos con usted sus angustias y sufrimientos, hoy, en este día tan especial, El Comité de Historia de Mao Inc., junto a sus hijos le rendimos este MERECIDÍSIMO HOMENAJE PÓSTUMO, y le decimos:
¡Salve Madre Abnegada!, porque cuando la patria clamaba por sus mejores hijos les entregó los suyos.
¡Salve Madre Valiente!, porque los verdugos de sus hijos nunca la vieron inclinar su frente.
¡Salve Madre!, porque con su ejemplo formó hombres y mujeres con principios y valores que hoy son orgullo de nuestro pueblo.
¡Salve Madre!, porque sabemos que en este instante, desde el cielo nosotros todos junto a sus hijos estamos recibiendo vuestra bendición.
¡Salve Madre!, nos inclinamos reverente ante usted.
¡Salve Por Siempre Doña Teófila María Gómez Brea De Reyes.
Diana Mármol
Miembro Comité Historia Mao
19 de Mayo 2013
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